Fertilización Potásica
Patricio A. Sandaña, Ing. Agr., M.Sc.,Dr.
Sandra Orena, Ing. Agr.
INIA Remehue
FERTILIZACIÓN POTASICA EN EL CULTIVO DE PAPA
El potasio (K) es un macro-nutriente esencial para el y del cultivo de papa. En suelos con niveles deficientes de este elemento el cultivo básicamente desarrolla una menor cobertura de follaje (Foto 1 y 2), lo cual reduce la captura de energía solar y en definitiva disminuye el rendimiento. Además, en condiciones de deficiencia de K más severa, se observa amarillamiento y daño desde los márgenes al centro de las hojas en las hojas más basales (Foto 1 y 3). Por lo tanto, una fertilización potásica razonada es una práctica de gran importancia si es que se quiere alcanzar un rendimiento de calidad, de manera rentable y amigable con el medio ambiente. Sin embargo, la estimación de la dosis de fertilización potásica resulta ser un gran desafío; debido a que se deben tomar en consideración: (i)
En base a estos conceptos se a desarrollado una Calculadora de Fertilización, con la cual es posible estimar las dosis de nutrientes (NPK) y fertilizantes.
La de K, es la cantidad total de K que absorberá el cultivo durante la temporada y, por lo tanto, es el producto entre la materia seca total a alcanzar (según el rendimiento esperado) y la concentración de K en dicha materia seca; el de K es la cantidad de K que puede ser aportado por el suelo durante el del cultivo, el que debe ser determinado mediante el análisis químico del suelo. Por último, la potásica, corresponde a la fracción del nutriente total aplicado que será absorbido por el cultivo, la cual depende del tipo de suelo y de la tecnología de aplicación del fertilizante (forma de aplicación).
Conocer las consideraciones básicas para estimar la dosis de fertilización potásica razonada en base a las investigaciones realizadas en las últimas temporadas (2009-12) en el marco del Proyecto Consorcio Tecnológico de la Papa.
Foto 1. Ensayo de fertilización potásica en el cultivo de papa con la variedad Patagonia-INIA en Chiloé durante la temporada 2015-16. Tratamientos sin fertilización potásica (izquierda) y con 350 kg KCl/ha (derecha). Contenido inicial de K en el suelo de 86 mg/kg. Bajo condiciones de déficit de K (izquierda), el cultivo de papa no cubre la hilera producto del menor foliar.
Foto 2. Cultivo de papa con la variedad Patagonia-INIA en la localidad de Purranque durante la temporada 2010-11. Tratamientos sin fertilización potásica (izquierda) y con 300 kg K2O/ha (derecha). Bajo condiciones de déficit de K (izquierda), el cultivo de papa tarda en cerrar la hilera producto del menor follaje desarrollado.
Foto 3. Deficiencia de K en el cultivo de papa. Fotografía correspondiente al tratamiento sin fertilización potásica presentado en la Foto 1 (izquierda).
LA DE K
La absorción total de K se relaciona principalmente con el rendimiento que va a alcanzar el cultivo durante la temporada. Si bien, las variedades de papa pueden diferir en la concentración de K en sus tejidos, esta variable no explica las variaciones en la absorción total de K en respuesta a distintos ambientes y/o manejos agronómicos. Por lo tanto, debido a la gran variación de los rendimientos, las de K que desarrolla el cultivo, en los distintos sistemas productivos del Centro-Sur y Sur de Chile (desde VIII a X Regiones), son muy distintas. A partir de datos experimentales se ejemplifica la relación positiva entre la absorción de K y el rendimiento total del cultivo, lo cual indica que en la medida que aumenta el rendimiento de un cultivo mayor será la absorción total de K (Fig. 1). Con la pendiente de esta relación establece un de 4,3 kg K por cada tonelada de papa cosechada (Fig. 1). Este factor es útil para calcular la de K del cultivo. Por ejemplo, si dos productores, uno con bajo y otro con alto nivel tecnológico, estiman rendimientos de 30 y 60 t/ha, respectivamente, las de K serán de 129 y 258 kg K/ha, respectivamente (toneladas de rendimiento x 4,3 kg K/t).
Figura 1. Relación entre la absorción total de potasio (K) y el rendimiento total alcanzado. Los datos fueron obtenidos de las variedades Karu-INIA y Puyehue-INIA cultivadas bajo 5 niveles de fertilización potásica en dos fechas contrastantes de plantación (10 Octubre y 10 de Noviembre) en la temporada
EL DE K
El de K es una variable dependiente tanto del tipo de suelo como del historial de manejo del potrero. El indicador de de K en el suelo es el K intercambiable, el cual se encuentra adsorbido electrostáticamente en la superficie coloidal del suelo y en equilibrio con el K de la solución del suelo, además, se correlaciona con el K absorbido por el cultivo. Por lo tanto, es muy importante realizar un análisis químico del suelo, previo a la plantación del cultivo de papa, para determinar la concentración de este nutriente y, así, establecer el grado de deficiencia o suficiencia de K. En base a experimentos de fertilización, realizados con distintas variedades (Karu-INIA, Puyehue-INIA y Patagonia-INIA) y con rendimientos inferiores a 65 t/ha, se ha podido establecer un umbral crítico de potasio intercambiable de 200 mg K/kg, nivel bajo el cual se observaron reducciones del rendimiento (Fig. 2). Por lo tanto, aquellos suelos con concentraciones de K menores a 200 mg K/kg requerirán una fertilización potásica de corrección, mientras que suelos con niveles superiores a esta concentración de K requerirán una fertilización de mantención.
Figura 2. Relación entre la reducción del rendimiento de papa y la concentración de potasio intercambiable en el suelo. Los datos fueron obtenidos de 20 experimentos (desde el 2008 al 2012) de fertilización potásica realizados en diferentes condiciones edafoclimáticas (VIII a X Regiones).
En los suelos con concentraciones menores a 200 mg K/kg se relacionó el K total absorbido por el cultivo de papa con los niveles iniciales de K intercambiable, estableciéndose un factor de absorción de K del cultivo de 1,15 kg K absorbibles por cada 1 mg K/kg en el suelo (Fig. 3). Este factor de absorción de K es útil para estimar un de K en el cálculo de la dosis de corrección de potasio (situaciones con niveles menores a 200 mg K/kg). Por ejemplo, un suelo con una concentración inicial de K de 150 mg/kg tendrá un suministro de K 173 kg K/ha (150 mg/kg x 1,15). Es necesario destacar que este factor de absorción refleja la habilidad del cultivo de papa para absorber el K desde el suelo, lo cual se relaciona directamente con el tamaño y distribución de su sistema radical. En este sentido, es probable que cultivos con un mayor sistema radical (como cereales y leguminosas) posean un factor de absorción de K superior al de la papa.
Figura 3. Relación entre la absorción de K y la concentración inicial de K en el suelo. El de K se calcula como el producto entre el factor de absorción de K de 1,15 y la concentración inicial de K intercambiable en el suelo.
LA EFICIENCIA DE FERTILIZACION
La eficiencia de la fertilización potásica es un parámetro dependiente del tipo de suelo y de la capacidad del cultivo de absorber el potasio incorporado al suelo. Aunque el K es un macronutriente inmóvil en el suelo, la fuerza con que este nutriente es fijado al suelo es mucho menor en comparación a la de otros macronutrientes como el fósforo (P). En suelos deficientes en K se han observado eficiencias de fertilización aparente de 60%. Por lo tanto, este valor es recomendable para ser utilizado en el cálculo de la dosis de fertilización. Para una fertilización eficiente se recomienda localizar e incorporar el fertilizante potásico en el surco previo a la plantación del tubérculo semilla.
1. Recomendación general
En el Cuadro 1, se presentan las dosis de KCl de referencia, para diferentes combinaciones de rendimientos y concentraciones iniciales de K intercambiable en el suelo. En el cálculo de las dosis de K, se utilizaron como de K, factor de absorción de K y eficiencia de fertilización potásica: 4,3 kg K/tonelada, 1,15 kg K/mg K kg-1 y 60 %, respectivamente. La fórmula utilizada fue:
Dosis de KCl (kg KCl/ha) = (((Rendimiento x 4,3) – (K intercambiable x 1,15))*1,9)/0,60
En la fórmula, el factor 1,9 sirve para transformar la dosis de K a KCl, que es la forma química que comúnmente se encuentra en los fertilizantes. La dosis final de fertilizante o mezcla dependerá de la concentración de KCl en dichas fuentes. En cualquier caso, las dosis del Cuadro 1 deberán ser divididas por la concentración de KCl de la fuente potásica a utilizar. Por ejemplo, si la dosis seleccionada en el Cuadro 1 es 90 kg KCl/ha y se dispone de un fertilizante con 60% de KCl, la dosis final de fertilizante será de 150 kg/ha del fertilizante, mientras que si se dispone de una mezcla con 20% de KCl las dosis corresponderá a 450 kg/ha de mezcla.
En aquellas situaciones con “dosis cero” de potasio (Cuadro 1) se recomienda una fertilización de mantención equivalente a 3 kg K/tonelada cosechada, es decir, 5.7 kg KCl/t.
Cuadro 1. Dosis de referencia de Cloruro de Potasio (kg KCl/ha) según rendimiento esperado y concentración inicial de K intercambiable en el suelo (0-20 cm de profundidad).
CONCLUSIONES
Una producción rentable y sustentable en el cultivo de papa requiere de un manejo razonado de la fertilización K. Por lo tanto, una dosis de fertilización potásica debe ser establecida a partir del balance entre de K y de K. Por tal motivo es que no existe una dosis única de fertilización, debido a que los sistemas productivos difieren en rendimiento y en las características de suelo. Para estimar la es necesario proyectar el rendimiento esperado de acuerdo a las características de cada sistema productivo (interacción agronomía y ambiente), mientras que para estimar el del suelo es necesario hacer el para la determinación de la concentración de K intercambiable. Finalmente para el cálculo de la dosis de potasio se estableció una potásica de 60%.
Adaptado de: Sandaña, P., Rojas, J.S., Orena, S., Kalazich, J.K. 2013. Fertilización potásica en el cultivo de papa. Informativo INIA N°123.